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Blogs Pasando por el aro por Emilio V. Escudero

Así serán los Lakers del futuro

Emilio V. Escudero el

Recortes salariales, la salida de caras emblemáticas, el posible adiós de Mike Brown al banquillo y una renovación total de la plantilla. El adiós de los Lakers al anillo provocará cambios importantes dentro de la franquicia. 

Su llegada a Hollywood en febrero de 2008 pilló a todos por sorpresa. Incluso dentro de la NBA, pocos entendieron entonces que los Grizzlies le dejaran ir a cambio de un puñado de jugadores de medio pelo y un desconocido llamado Marc con su mismo apellido.

El traspaso de Pau Gasol a los Lakers levantó ampollas entre el resto de aspirantes al anillo. Popovich llegó a calificarlo como fraudulento, sabedor de que un equipo que hasta entonces no tenía entidad para luchar por el título, se había convertido en su máximo rival en el Oeste. “Gasol significa ganar campeonatos”, llegó a declarar Kobe Bryant, que veía en el español el compañero perfecto para seguir saciando su hambre de victorias. En estas cuatro temporadas los Lakers lograron dos anillos y llegaron a una final, pero han terminado con dos últimas campañas para olvidar, sobre todo la pasada, con la vergonzosa eliminación a manos de los Mavericks por 4-0.

La de anoche significa un punto y aparte en la historia de la franquicia angelina. Una mirada al futuro en la que, seguramente, no estarán muchos de los que han sido incapaces de vencer a los Thunder. Solo cinco jugadores (seis si contamos a Eyenga que seguramente sea cortado) tienen contrato en vigor para la próxima temporada: Bryant, Gasol, World Peace, Blake y McRoberts, además de Bynum, al que ya le han dicho que ejercerán la opción que tienen para retenerle un año más.

Sumando esos seis salarios, los Lakers ya se pasarían, por mucho, del tope salarial. Algo más de 60 millones de euros por seis jugadores, algo imposible de aguantar después del acuerdo del cierre patronal, que grava mucho más a los equipos que se pasan de la barrera de los 45 millones.

Con ese panorama, está claro que los Lakers tendrán que deshacerse de efectivos y el primero de la lista, como dejó claro Kupchak durante esta temporada, es Pau Gasol. Lo lógico, si finalmente se queda Sessions (será una decisión personal ejecutar la cláusula de renovación por 3,5 millones), el general manager de los Lakers buscará un alero con el que paliar la ausencia de anotación desde el perímetro. Un Shannon Brown como aquel que lideraba el banquillo angelino durante el anillo de 2010. Un sexto hombre de verdad, que supla el vacío dejado por Lamar Odom y que venga acompañado de un buen suplente. Un 2×1 que libere masa salarial.

El otro movimiento debería ser quitarse los 5.6 millones que cobra Metta World Peace por temporada (11 millones en dos años que le quedan). Una amnistía permitiría liberar esa carga y buscar un alero alto del estilo, pero más atlético y con mejor muñeca. Sacrificar su talento defensivo a cambio de tener en el roster un jugador menos temperamental.

Sin opciones de pescar algo importante en el draft, la única opción de mejora adicional sería incluir en el traspaso de Pau una joven promesa sin mucho cartel. Ahí entraría en juego el trabajo de los ojeadores. Un “robo del draft”. Uno de esos jugadores con los que nadie cuenta por su alto número de elección, pero cuyo rendimiento termina siendo clave (como ocurrió, por ejemplo, en el caso de Marc Gasol).

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Emilio V. Escudero el

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