En la obra pictórica de Peter Doig (Edimburgo, 1959), la memoria y la imaginación del artista se vuelcan en representaciones de paisajes que evocan sensaciones y huellas del pasado. Casas deshabitadas y arquitecturas modernistas engullidas por la energÃa vital y desbordante de la naturaleza, parajes cubiertos por velos de nieve o por translúcidas cortinas, figuras que se dejan entrever, canoas flotando en aguas calmas… Una pintura caracterizada por la intensidad y al mismo tiempo por un ambiente de quietud y ensoñación.
Peter Doig, cuya obra se exhibe por primera vez en España, nos habla con este motivo sobre su trayectoria artistica:
Nació en Edimburgo pero tempranamente se trasladó a Trinidad donde vivió hasta los 7 años. Luego residió en Canadá hasta los 19 y más tarde en Londres donde cursó sus estudios superiores. Finalmente, en 2000 volvió para instalarse en Trinidad. ¿Cómo cree que ha influido en su pintura esta vida nómada?
Este tipo de vida ha tenido una importante influencia en mi pintura, porque me ha abierto a temas que de otro modo no se me habrÃan ocurrido. Si hubiera pasado la vida en un solo pueblo, ciudad o paÃs no hubiese sido lo mismo. Vivir en un sitio no es igual que visitarlo, y he tenido la suerte de vivir en lugares que no solo aparentemente son distintos entre sÃ. Todos han tenido un profundo impacto en mi forma de pintar y en lo que pinto.
Me han influido esos tres artistas, entre muchos otros. Por ello las conexiones son visibles. Pero eso se puede decir prácticamente de cualquier pintor. Todos estamos influidos por la historia del arte.
El misterio no es intencionado. Quiero intentar pintar una cara (o un cuadro) que se pueda mirar durante mucho tiempo sin aburrirse, que siga sorprendiendo. Si para mà no hay elementos de sorpresa, tampoco los habrá para el espectador.
Escondido, velado y misterioso, ¿cree que hay un aspecto erótico en su pintura?
Es el espectador quien tiene que sentirlo y responder a eso. Yo no me atreverÃa a afirmar que haya un aspecto erótico en mi pintura. Incluso aunque estuviera de acuerdo. Si funciona, pues mejor. Pero es una impresión, no es algo que un artista pueda decir de su obra, a no ser que sea demasiado evidente y descarado.
Yo les decÃa: tomaos vuestro tiempo, no tengais prisa, dejad que vuestra obra se desarrolle con el tiempo. No siempre hay que entender el significado de nuestra obra.
Siempre la estoy buscando, pero no puedo decir que la persiga. Más que nada viene por sorpresa, cuando menos lo espero. En mi caso, perseguir las cosas rara vez da resultados.