ABC
| Registro
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizABC
Blogs A la sombra de la Acrópolis por Begoña Castiella

Sobrevivir en Atenas

Begoña Castiella el

Todo son malas noticias en Grecia: sólo se habla de la crisis y sus recortes, del rescate que no se ve, de la gente que empieza a pasarlo mal de verdad. Los griegos, un pueblo mediterráneo al que le gusta vivir bien y cuyo nivel de vida en los últimos veinte años había mejorado notablemente, ahora sufren. En su diario, en su trabajo, en su compra. Y sobre todo en lo relacionado con el trabajo.

Ahora la sociedad griega está en vacaciones y las huelgas se han terminado hasta septiembre, si no contamos la desastrosa huelga de taxis que ha dificultado los viajes y el diario de los turistas. Todos temen la llegada de Septiembre , los nuevos recortes e impuestos , las huelgas y posiblemente las manifestaciones de violencia. Hasta los políticos, que ahora se tienen que esconder, por miedo de ser insultados y atacados. ¿Quién lo hubiera dicho en uno de los países mas seguros de Europa ?

Todo sube menos el sueldo y la pensión : una pensión media es de 700 euros y un sueldo medio actual no sobrepasa los 1.100 euros
Todo está caro, todo está mucho mas caro, dice Sofía. Es una asistenta jubilada que vive con su hija, su yerno y su nieta en una barriada ateniense. No cotizó nunca a la seguridad social griega y ahora recibe una ayuda de 200 euros al mes del estado por mayor de 65 años sin ingresos .No se la recortarán, pero Sofía vé como todo ha subido de precio, empezando por el supermercado, al menos un 10% y su hijo Yorgos, un mecánico, lleva tiempo sin conseguir trabajo y sin poder cobrar ya el paro.

Su hija Kety, de 49 años, era cajera en una mercería. Ha conseguido pre jubilarse con los derechos de la ley anterior de pensión, que permitía a quién había trabajado mas de 15 años con hijos menores de 18 años acceder a la prejubilación. Pero Kety aún no cobra su pensión desde que presentó su expediente y van ocho meses. Esto es debido al inmenso retraso en la burocracia de la seguridad social, ya que desde finales del 2009 quienes tenían derecho a este tipo de prejubilaciones se han precipitado a pedirlas. A partir de ahora y trás la reforma de la ley de pensiones hace unos meses, se han terminado muchos de los privilegios griegos y todas las mujeres que cotizan deberán jubilarse a los 65, como los hombres .

El marido de Kety, Dimitris, es un ferviente comunista, del partido KKE. Se jubiló el también tras treinta y cinco años de trabajo (ahora se necesitarán 40 años) y aun así, va todos los días a la sede del partido a echar una mano. Los comunistas son los únicos que en las manifestaciones griegas siempre desfilan los primeros, en filas y con banderas rojas, de forma ordenada… y se retiran cuando empieza el follón.

Dimitris está indignado con lo que vé como la caída de Grecia, los robos y engaños de los políticos y de la clase pudiente en general, la venta del patrimonio griego (refiriéndose a las privatizaciones que deberán hacerse rápidamente). Habla de la muerte del capitalismo y de la necesidad de abandonar la UE y volver a la dracma.
La familia vive en un piso de su propiedad, algo muy común en Grecia: los padres regalan a sus hijos un piso al casarse independientemente de su nivel social y les ayudan en todo momento. Se supone que los hijos cuidarán de ellos de mayores (y se cumple, entre otras cosas porque hay poquisima ayuda y residencias estatales para la tercera edad). Las pensiones son bajas porque también lo son los sueldos. Una pensión media es de 700 euros y un sueldo medio actual no sobrepasa los 1.100 euros . Pero quienes tienen deudas, sobre todo de préstamos bancarios para el consumo, de esos que casi regalaban los bancos, están en apuros.

Deudas y ventas : lo primero que hacen los deudores es vender el coche
Salen del banco casi llorando. Quienes casi les perseguían para un crédito para comprar un piso, hacer unas renovaciones, comprar coche o ir de vacaciones a gusto ahora han cambiado de cara.Lo primero que hacen los deudores es vender el coche (o los coches , en muchos casos), sobre todo si son de lujo. Los impuestos han aumentado y hay muchas formas de que te «pillen» en una revisión fiscal : una de ella los coches que declaras. Luego intentan vender un piso , que en general es el de los padres que irán a vivir con los hijos. Ahí las cosas son mas difíciles: pisos que valían 300.000 euros hace dos años se venden con dificultad a menos de 230.000 euros y los de 200.000 no alcanzan los 140.000

Solo venden los que están desesperados, los demás esperan a que vuelva a subir el mercado. Quienes vivían de alquileres tienen serios problemas para pagarlos : antes eran caros, sobre todo los de las tiendas, pero muchos dueños no aceptan una reducción. Tienen que irse y buscar antes algo mas barato. Un piso de tres habitaciones de menos de cinco años a las afueras de Atenas podía alquilarse por mas de 700 euros y ahora se puede conseguir por hasta 450 euros.

Las ciudades griegas se han llenado de carteles de «se alquila», de «se vende» y de «Compro ORO».En el centro de Atenas he visto con mis propios ojos a muchas señoras arregladas entrar casi a escondidas, con el bolso apretado entre los brazos, a las tiendas que compran oro. Ahí depositan cadenas, medallas, pulseras y pendientes de varias generaciones con tal de salir del aprieto, evitar que el banco se quede con el piso o la casa y lo malvenda después .Y todos  tienen miedo en el centro, sobre todo en la parte de la Plaza de Omonia: es dónde se reúnen los parados, los drogadictos y los inmigrantes sin trabajo (legales o no). Hay una atmósfera de tensión y miedo y la policía patrulla constantemente. Los residentes, en su mayoría de la tercera edad, votan a la extrema derecha.

Los informes del Banco de Grecia lo confirman: cada mes los griegos van retirando sus ahorros. De enero a junio de este año, un 10% del total del dinero depositado en bancos griegos, 21.4 mil millones de euros. Unos para sobrevivir, otros para evadir al extranjero. Y los más para tenerlo a salvo de un corralito en casa o para comprar oro.

Más impuestos y menos propinas
Apostólis, el dueño de una taverna en el centro de Plaka (el bonito barrio antiguo bajo la Acrópolis ) está preocupado.«Hasta ahora, conseguía mantener la mayoría de los platos muy por debajo de los 10 euros. Pero ahora que el gobierno nos ha subido el IVA al 23% a los restaurantes y tabernas, lo voy a tener difícil. Mantener la calidad de la comida, con productos griegos, seguir con el mismo personal, también griego, estando abiertos todos los días menos los domingos. Lo veo muy difícil.»

Pero su taberna, que en verano se extiende al aire libre bajo un enorme plátano y a la sombra de unas parras, sigue llena de extranjeros durante el día y de locales, por lo general mayores, por la noche. Este año los locales se han ido una o dos semanas, nada más, de vacaciones . Y a casas de familia o amigos cerca del mar, no a hoteles. Y los camareros de Apostólis confirman que toda la gente ahora deja muy pocas propinas, no pide mucho pescado fresco (caro en Grecia a pesar de sus muchas costas) ni vino de marca, prefiriendo el vino de la casa o la cerveza fresquita.

 

Para colmo, la mayoría de la fruta y la verdura es ahora importada (queda poca agricultura en Grecia) y cada vez mas cara y mala. Pero Apostólis sabe que el estado griego gastaba más de lo que debía y que muchos eran los funcionarios que salían de sus oficinas antes de tiempo y venían a comer. «El estado no tenía control ni disciplina. Desde que llegaron los socialistas (refiriéndose a Andreas Papandreu en 1981) esto era jauja. A lavar platos una temporada les pondría yo a todos».

El comercio, en crisis


EL dueño del kiosko en el céntrico barrio ateniense de Ambelokipi, , Yorgos, está preocupado. “Yo sobrevivo porque estoy mas horas todos los días y el resto del tiempo están miembros de mi familia atendiendo . Pero la gente compra mucho menos: menos revistas, menos periódicos. Hasta fuman menos, ahora que han subido el precio del tabaco y está oficialmente prohibido fumar en los edificios públicos, en las oficinas y dentro de los restaurantes. En esta avenida ( refiriéndose a la avenida de Kifisías, que lleva hacia el norte de la capital ) han cerrado desde finales del 2009 muchos comercios, algunos con la excusa de jubilarse los dueños pero la mayoría porque ya no podían pagar los alquileres, que eran muy caros, ni el gasto de varios empleados . Vendían poco, la gente compra ya lo justo. Y han cerrado antes de tener deudas “. La Confederación Nacional de Comercio Griego le dá la razón: ha cerrado hasta el 30% de los comercios en muchas zonas de Atenas y otras ciudades comparados con los datos del año pasado. Un comercio de cada cuatro. Las estadísticas confirman que se han perdido mas de 200.000 puestos de trabajo desde que Grecia entró en recesión en otoño del 2009. Y la mayoría de los medios de comunicación están en crisis, con enormes deudas y en muchos casos con personal empezando por periodistas y presentadores sin cobrar desde hace varios meses.

 

.

“Aquí no firma contrato indefinido nadie, solo temporales. “Lo dice Marina, que es filóloga y está de suplente para entrar de profesora en el sistema educativo griego. Espera a conseguir plaza fija en algún colegio estatal , y entre tanto dá clases privadas de septiembre a junio. Los griegos tienen acceso a la educación gratuita incluida la universidad , pero en general por las tardes los niños ( desde los 7 años ) van a una academia a repasar o tienen clases particulares en casa . Una locura de sistema. Pero Marina con suerte cobra 10 euros la hora con los pequeños y 20 con los alumnos de secundaria. Pero cada vez hay menos clases: es uno de los primeros gastos que se eliminan cuando las cosas se ponen duras. Ahora trabaja de monitora en un campamento de verano. Y con suerte a partir de septiembre la llamarán de suplente, para ir a cualquier parte de Grecia. “Ojalá”, suspira. Ella y sus padres siempre han creído en las ventajas de ser funcionarios. A pesar de que ahora el gobierno ha dejado bien claro que se contratará a un funcionario por cada 10 que se jubilen .

JOVENES A TRABAJAR FUERA

Yorgos, un chico de 23 años que tras terminar su carrera ( económicas en Inglaterra ) ha vuelto a Grecia, lo confirma :”Quién puede de mi generación se vá fuera”. El no se vá: trabaja para la empresa de sus padres , con su hermano. La empresa es una compañía que se ocupa de la instalación o reforma de cualquier tipo de tienda. Llevan ya dos años con mucho menos trabajo. La compañía todavía factura millones, pero tiene mayoría de clientes que adeudan grandes cantidades y ellos también deben a muchos proveedores. Yorgos cobra su sueldo literalmente cuando hay dinero en la caja familiar . Entre sus amigos,todos con la carrera acabada, la mayoría están haciendo la mili ( obligatoria para los chicos) o terminando un master. Y sino,han encontrado trabajos en el extranjero. Los universitarios griegos se colocan bien en Europa y mas lejos, como los Emiratos o Africa del Sur : tienen buenos estudios, son espabilados, todos hablan un inglés correcto y otro idioma mas y trabajan a fondo.”Aquí sólo nos espera un trabajo de 700 euros si tenemos suerte y enchufe. Los próximos dos años serán una m….”. ¿La crisis ? No la entienden muy bien. El que todo el mundo quisiera ser funcionario para currar poco y tener trabajo seguro era lo normal, el buscar enchufes entre políticos para “colocar” a la familia también . Y engañar a Hacienda, un deporte nacional . Pero las consecuencias las notan en casa: preocupación y malas caras, menos gastos, menos salidas, vacaciones en casa del abuelo,mal humor general, manifestaciones, huelgas que paralizan el día de toda la familia. Y las estadísticas oficiales muestran que el paro está subiendo , ahora en el 15 %, pero en jóvenes entre 18 y 24 roza el 30% .

POLITICOS CON MIEDO

¿Quién hubiera dicho que los diputados y peces gordos de los grandes partidos iban a esconderse ? Hasta ahora fardaba de puesto y de status , de guardaespaldas y de coche, de poder . Ahora… se esconden, tanto si son políticos en activo o jubilados. Un diputado griego , con un sueldo alrededor de 7.000 euros, tiene derecho de tener 2 asistentes y 1 policía a su servicio para empezar, y mas privilegios ( desde mandar cartas gratis y no pagar teléfonos hasta descuentos fiscales ) . Todos los que trabajan con ellos son elegidos personalmente provenientes del sector público . Pero en los últimos meses hay nuevas asociaciones que se reúnen para insultarlos a la puerta de sus casas, hay tomates y yogures que les caen sobre los trajes cuando van a un acto político, hay veces que se tienen que levantar de un restaurante o de una taverna para que no los peguen o insulten. Gente desesperada se acerca no ya a pedir un favor, sino a soltar su indignación y su amargura, acusándoles de ser ladrones, de favorecerse, de mirar sólo por los suyos. Lo nunca visto.

DESCUENTOS Y OPTIMISMO

Pero no todo son lamentos en Grecia. Hay gente que además de sobrevivir, se las apaña para ver el futuro con optimismo. Y se puede ver con gente joven y en muchos sitios además de Atenas.  Como Simoni Delatola, que con sus hermanos lleva un conjunto de pequeños y coquetos apartamentos en la isla de Tinos, en el Egeo, propiedad de su familia . “Este año en junio no vino nadie. Pero en julio empezamos a tener lleno desde el 20, y ahora estamos a tope. “ Pero luego me explica que han mantenido los precios de temporada baja y han hecho ofertas. Y que se han juntado con otros hoteles y pensiones, restaurantes y tiendas de alquiler de coche para ofrecer a sus clientes calidad a mejores precios. “Funciona: empecé con otros amigos de mi edad , mandándonos clientes el uno al otro y ahora somos cada vez mas. “ Eso sí: trabaja toda la familia a todas horas. Y su hermano Manthos tiene un centro de buceo , que vá muy bien ,pero manteniendo los precios del año pasado.

“La crisis pasará, pero si la gente se queda contenta , volverá “. Eso es lo que le importa a Simoni: llenar sus apartamentos , que los clientes lo pasen bien y vuelvan .

El sector turístico siempre llora, pero este año ha sido mejor que el catastrófico año pasado , aunque todos han bajado los precios a todos los niveles. Se acabaron las vacas gordas no sólo con los clientes griegos, sino con los extranjeros :”Cada vez son mas mirados , ya no se puede timarles como antes” me comenta un camarero del aeropuerto de Atenas. A pesar de las huelgas generales, de las manifestaciones con actos violentos, de los taxistas timadores, Grecia es un país precioso . Y los griegos, que han sufrido muchas tragedias, saben que todo pasa. Ahora muchos otros países tienen problemas parecidos…

Otros temas

Tags

Begoña Castiella el

Entradas más recientes